CONVENCIONALISMO
La distinción propuesta por los sofistas entre lo que es por naturaleza, φύσει («por nacimiento», «por su origen [natural]»), y lo que es por «ley», νόμῳ, equivale en muchos casos a una distinción entre «verdadero» o «real» (o «verdadero-real») y «convencional». Los sofistas discutieron si, y hasta qué punto, lo que se dice acerca de algo y, en general, el lenguaje mismo que se usa para decirlo, es resultado de convenciones. Si, como pensaron la mayor parte de los sofistas, la respuesta es positiva, entonces hay que renunciar a encontrar enunciados, teorías o doctrinas absolutamente ciertas. El carácter aceptable de un enunciado, de una teoría o de una doctrina es función de las convenciones de principio adoptadas, es decir, de que se haya llegado —no necesariamente de un modo explícito— a un «acuerdo» respecto a ciertas «verdades» básicas. Platón se opuso al «convencionalismo» de los sofistas, por lo menos en