NADA
En L’évolution créatrice (1907; Oeuvres, ed. del Centenario, 1959, pág. 728), Bergson declaró que la idea de la nada es «a menudo el escondido resorte, el invisible motor de la especulación filosófica». En todo caso, muchos sistemas filosóficos se han ocupado del llamado «problema de la Nada».
A veces se ha alegado (É. Gilson) que la idea de la nada no desempeña ningún papel, o, por lo menos, ningún papel importante, en la filosofía griega. En cambio, desempeña un papel fundamental entre los pensadores que han seguido las tradiciones judías y cristianas. Según Xavier Zubiri, el pensamiento griego es fundamentalmente «una filosofía desde el ser», mientras que el pensamiento cristiano, desde San Agustín a Hegel, es «una filosofía desde la Nada». Por otro lado, E. Bréhier (art. cit. en bibliografía) ha manifestado que, aunque la idea de la nada fue menos importante en la filosofía griega que en la cristiana y no fue en la filosofía griega