MALA FE
La noción de mala fe ha sido introducida por Sartre (L’Être et le Néant, 1943, págs. 85-111; trad. esp.: El Ser y la Nada, 1950) como una de las nociones fundamentales de su ontologia fenomenológica. Una de las características principales del ser humano es, según Sartre, que puede tomar actitudes negativas con respecto a sí mismo. La mala fe es un ejemplo particularmente iluminador de las actitudes de negación de sí, que son a la vez reveladoras del «ser de la nada». La mala fe es, según Sartre, un modo de negarse a sí mismo en lo que se es, esto es, como un ser para sí mismo (que es una nada con respecto al ser en sí). La mala fe se