INDEMOSTRABLES
Los viejos estoicos introdujeron en su lógica proposicional varios esquemas de argumentación simples y válidos que consideraron indemostrables. Estos argumentos eran considerados, pues, como axiomas o principios del razonamiento. El término ‘indemostrable’ (ἀποδεικτικός) significa que «no necesita» ser demostrado a causa de su «evidencia». La invención de tales modos se atribuye a Crisipo, pero fueron aceptados rápidamente por casi todos los filósofos estoicos y aun incorporados a otras lógicas. Referencias a los mismos se hallan, entre otros textos, en Diógenes Laercio (VII, 79), Sexto el Empírico (Adv. math., VIII, 22; Pyrr. Hyp., II, 156-157), Galeno (Inst. Log., 32), Cicerón (Top., 57); especialmente detallada es la reseña que da acerca del particular Sexto el Empírico. Algunos autores (Cicerón, Galeno) mencionan más de cinco de tales esquemas o modos de argumentación, pero lo usual es reducirlos a cinco.