AMOR DEI INTELLECTUALIS
Amor intelectual de Dios. Esta fórmula es conocida sobre todo por la Ética de Spinoza. En esta obra (cfr. V, prop. XIV), Spinoza escribe que la mente puede hacer que (efficere ut) «todas las afecciones del cuerpo o imágenes de las cosas se refieran a Dios». En prop. XV, Spinoza afirma que «el que comprende clara y distintamente sus afectos, ama a Dios, y ello tanto más cuanto mejor se comprende a sí mismo y comprende sus afectos». Según prop. XVI, el amor a Dios (Deum amor) «debe ocupar máximamente el espíritu» (Hic erga Deum amor mentem maxime occupare debet). Sigue Spinoza este tren de pensamientos con los asertos de que no se puede odiar a Dios; que hay en Dios necesariamente una idea que expresa la esencia de tal y cual cuerpo humano bajo forma de eternidad (sub aeternitatis specie); que la mente humana no puede ser destruida absolutamente con el cuerpo, sino que en ella permanece algo que es eterno; que cuanto más se comprenden las