ETERNO RETORNO
La doctrina según la cual el universo nace y perece en una sucesión cíclica tiene muy antiguos precedentes. Uno de ellos se encuentra en el hinduismo, que influyó en este respecto sobre el budismo. En este último se habla, en efecto de Kalpas, es decir, de períodos que van desde el nacimiento hasta la destrucción de un mundo. La duración de cada Kalpa es indeterminada, pero se supone muy grande (posiblemente, varios millones de años). El nacimiento del mundo tiene lugar por condensación extrema; su final, por una conflagración. El número de Kalpas es infinito, de modo que el proceso cíclico es eterno. La doctrina del eterno retorno o sucesión cíclica de los mundos fue defendida asimismo por muchos pensadores griegos; era común entre éstos considerar cada ciclo como un «Gran Año». Así, la teoría atribuida a Heráclito, según la cual el mundo surge del fuego y vuelve al fuego según ciclos fijados y por toda la eternidad (Diog. L.,